Me despierto o no sé como llamarlo. Es como estar despierta
pero no poder mover ni un músculo ni proferir ningún grito ni suplica. La
cuestión es que me levanto del suelo asfaltado. Estoy en un cubo o un
rectángulo. Mi corazón resuena por toda la habitación o ¿todo es mi invención?
Miro a Zeta, está tendido como los otros cuatro. Conmigo
somos 6, los únicos que conocemos este antro. Mierda, Jin se despertó y va
hacia Trina, le rompe el cuello y el cuerpo de Trina, inerte, se convierte en
ceniza y luego nada.
Me pongo en pie con un zumbido en las orejas, intento
despertar a Zeta pero veo que es imposible. Jin se fija en mí, me da un repaso
de pies a cabezas y se sonríe, qué querrá hacerme ahora?
Recuerdo hace dos noches o dos días: aquí no se ve la luz del sol. Me hizo…. Dejemoslo
no tengo tiempo. Corro hasta la otra punta de la habitación y cojo mis armas
favoritas: un machete y bombas de luz.
¿No sabéis lo que son las bombas de luz? Os lo explicaré son
unas bombas concentradas que deslumbran por un minuto a tu contrincante para
que puedas acabar con él.
Aún no lo he dicho? Este juego consiste en matar o morir, ¿tú
qué prefieres?
Te explicaré un poco, veo que andas perdido, si ganas o
matas a todos tus contrincantes: 5 personas, verás otra vez a tu familia y
tendrás un día normal, fuera de este sitio.
Por el contrario, si pierdes vuelves aquí justo un segundo
después que te murieras para empezar otra vez el juego.
La última vez que conseguí ganar el juego, fui a ver a
Futoshi un amigo de la familia, le expliqué todo sobre este sitio. Lo único que
hizo es reírse de mí y mis supuestas idas de cabeza. Sueño o mejor dicho:
anhelo con encontrar a alguien que haya ganado por fin el juego.
Sé que todos
saben algo que los otros no sabemos. Quien tendrá la llave para salir de este
infierno?
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